Siempre te enamoras de alguien que no saben tu nombre. Tu corazón dirige a tu cerebro. Te sientes mal con tu cuerpo. Te puedes despertar comiéndote el mundo o comiéndote el suelo. Estas perdida y no sabes que camino elegir y seguir. Dices que te gusta estar sola, pero necesitas a mucha gente cerca. Sueles llegar tarde a todos los lugares que vas. Intentas divertirte y disfrutarlo todo con tus amigos. Y por supuesto antes de salir de casa, te cambias un millón de veces de ropa y peinada, y normalmente siempre acabas con lo primero. Odias la distancia y la música es la única que te entiende.
Eso es ser adolescente.